Como los años pasan y mi sobrina Nerea (mi ratona) va creciendo la he preparado su Ratoncita Pérez en fieltro, es lo que tiene cambiar los dientes de leche. 🙂

Cuando se lo dí se puso muy contenta (había visto el de su hermano Alex), porque tenía el suyo propio. Comprobó que también tenía pelo, pero como dice ella, pelo de chica porque lleva un lazo y es más largo. Por supuesto llevaba su nombre y también puntualizó que era de color rosa como las princesas. El caso es que se puso así de contenta y posó igual de feliz con su Ratoncita Pérez.

Nerea con su ratocita Pérez

Al principio no le hacía mucha ilusión que se le cayeran los dientes porque le molestaban, le dolían, y se ponía un poco tontina. Pero ahora entre su ratoncita que le guarda su diente dentro de su barriga y el regalito que se encuentra por la mañana en el lugar donde estaba el diente, se pone súper contenta y no tiene problema en que se le caigan todos.

Pues ya tenemos un Ratoncito Pérez nuevo en la familia, a ver si la cosa se anima y vamos haciendo más. Aunque a su tía no le hace mucha gracia que crezcan tan rápido sus chiquitines, pero es lo que tiene…….